Mantener tu guitarra limpia es esencial para prolongar su vida útil y asegurar que suene de la mejor manera posible. A continuación, te presentamos un paso a paso para limpiar tu guitarra clásica:
El cuerpo: Para mantener limpio el cuerpo de tu guitarra, debes llevar siempre un trapo de algodón (puede ser una vieja camiseta) en el forro. Cada vez que termines de tocar, debes pasarle el trapo antes de guardarla para eliminar los rastros de sudor y suciedad. Si las manchas se han endurecido, puedes utilizar un trapo diferente, ligeramente humedecido con agua y jabón, y secar con cuidado. También puedes usar productos especiales para limpiar el cuerpo de tu guitarra.
Las cuerdas: La suciedad resta tono y vida útil a las cuerdas. Es importante lavarte las manos antes de tocar para prevenir el COVID y la suciedad en las cuerdas. Para limpiar las cuerdas, puedes utilizar toallas desechables de cocina o encordados inoxidables, como el INOX 130 de Concertina.
El diapasón: La mejor forma de limpiar el diapasón es al cambiar las cuerdas. Utiliza unas gotas de gasolina de mechero o la que se usa en los zippos para desengrasar el diapasón. Si tu diapasón es de palorosa o ébano, te recomendamos utilizar aceite de limón o aceite de parafina al 5% para recuperar su vida.
Clavijeros: Para limpiar los clavijeros, utiliza un cepillo de dientes seco para retirar el exceso de polvo y mugre. Para los piñones y engranajes, es recomendable usar aceite 3 en 1 cada 6 meses.
Siguiendo estos sencillos pasos, podrás mantener tu guitarra clásica en óptimas condiciones. Recuerda, es importante limpiarla después de cada uso, y hacerlo de forma regular, para mantenerla en perfecto estado y obtener el mejor sonido posible.